FACTORES CAUSALES Y VARIABLES PSICOLÓGICAS EN LA MASCULINIDAD TRADICIONAL: UNA REVISIÓN SISTEMÁTICA PRISMA

 

CAUSAL FACTORS AND PSYCHOLOGICAL VARIABLES IN TRADITIONAL MASCULINITY: A SYSTEMATIC PRISMA REVIEW

 

Francisco Javier Manriquez Espinoza[1]

Giovana Rocío Díaz Grijalva[2]

Carlos Alberto Mirón Juárez[3]

Jehomara Anahí Mercado Obeso[4]

 

DOI: https://doi.org/10.32870/lv.v7i62.8063

 

Resumen

La masculinidad ha sido objeto de un creciente interés en el ámbito de la psicología, debido a su impacto significativo en diversos aspectos de la vida de los hombres, la cual abarca una serie de características, conductas y roles que se relacionan con el concepto de hombría dentro de una sociedad específica. Así, en los últimos años, la investigación ha comenzado a explorar diferentes factores y variables que sustentan y perpetúan la masculinidad tradicional. Por lo tanto, el objetivo de esta revisión sistemática es identificar factores causales y las variables psicológicas asociadas con la masculinidad tradicional. Se llevó a cabo una búsqueda bibliográfica tomando en cuenta la declaración PRISMA 2020 de artículos sobre factores causales y variables psicológicas asociadas con la masculinidad tradicional. Se empleó el método de búsqueda en las bases de datos: Science Direct, Scopus, Web of Science, PubMed, PsyINFO y ProQuest, la inclusión de documentos se limitó al período comprendido entre 2014 y 2024. Al final, fueron seleccionados 12 artículos para ser incluidos en la revisión por cumplir completamente con todos los criterios de inclusión. Los resultados relevantes fueron identificar factores causales y variables psicológicas relacionadas con la masculinidad tradicional como: apoyo de amigos, búsqueda de ayuda, depresión, agresión, alexitimia, supresión, narcisismo, coerción e ideación suicida. Como conclusión, este estudio aporta una visión integral de cómo diferentes factores contribuyen a la construcción de la masculinidad tradicional, ofreciendo una base para futuras investigaciones e intervenciones.

 

Palabras Clave: masculinidad, factores causales, salud mental, psicología

 

Abstract

Masculinity has been the subject of growing interest in the field of psychology, due to its significant impact on various aspects of men's lives, which encompasses a series of characteristics, behaviors, and roles that are related to the concept of manhood within a specific society. Thus, recently, research has begun to explore different factors and variables that support and perpetuate traditional masculinity. Therefore, this systematic review aims to identify causal factors and psychological variables associated with traditional masculinity. A bibliographic search was carried out, considering the PRISMA 2020 statement of articles on causal factors and psychological variables associated with traditional masculinity. The search method was used in the following databases: Science Direct, Scopus, Web of Science, PubMed, PsyINFO and ProQuest, the inclusion of documents was limited to the period between 2014 and 2024, in the end 12 articles were selected to be included in the review for fully meeting all the inclusion criteria. The relevant results were the identification of causal factors and psychological variables related to traditional masculinity, such as support from friends, help seeking, depression, aggression, alexithymia, repression, narcissism, coercion, and suicidal ideation. In conclusion, this study provides a comprehensive view of how different factors contribute to the construction of traditional masculinity, offering a base for future research and interventions.

 

Keywords: masculinity, causal factors, mental health, psychology

 

Recepción: 21 de octubre de 2024/Aceptación: 26 de marzo de 2025

 

Introducción

La masculinidad ha sido objeto de un creciente interés en el ámbito de la psicología, debido a su impacto significativo en diversos aspectos de la vida de los hombres, la cual abarca una serie de características, conductas y roles que se relacionan con el concepto de hombría dentro de una sociedad específica, estos atributos y comportamientos son construcciones sociales que pueden diferir considerablemente entre distintas culturas, contextos y periodos históricos (Arandjelović, 2023; Connell y Messerschmidt, 2005). ​

En el contexto actual se puede identificar el concepto de masculinidad tradicional, Levant et al. (2013) lo refiere como un conjunto de creencias y tradiciones de los hombres, las cuales son dirigidas hacia el comportamiento masculino, evitando cualquier rasgo de feminidad, limitaciones emocionales, autosuficiencia, dominancia, dureza y la práctica de una sexualidad poco afectiva, así como hostilidad hacia los hombres homosexuales. Azmar (2015) lo señala como parte de un constructo cultural, en donde el hombre se rige por normas y lineamientos religiosos, políticos, económicos y sociales. Sin embargo, dentro del área de la psicología, Salas Calvo (2008) propone estudiar al hombre sin estereotipos e ir avanzando en el análisis de variables psicológicas que ayuden a explicar el comportamiento del papel y el rol del hombre en sus diversas facetas sociales, procurando su bienestar.

Del mismo modo, la masculinidad hegemónica hace referencia a los rasgos y comportamientos negativos y socialmente adversos asociados con las normas masculinas idealizadas (Connell, 1987; Jewkes y Morrell, 2018; Kupers, 2005). Estas varían según el entorno, pero a menudo representan a los hombres como heterosexuales, fuertes, jefes de hogar, proveedores económicos, con derecho al sexo y, sobre todo, dominantes sobre las mujeres y algunos grupos de hombres (Connell y Messerschmidt, 2005; Jewkes y Morrell, 2018). Por ello, las normas no solo influyen en el comportamiento individual, sino que también tienen profundas implicaciones en la salud mental y física de los hombres.

Aunado a esto, según la Organización Panamericana de la Salud (2019) para entender y sintetizar las consecuencias de la socialización masculina resulta útil el concepto de la masculinidad como factor de riesgo, como una síntesis que articula las masculinidades, su construcción social y la forma en que afecta a la salud. Desde una socialización en la masculinidad hegemónica, el hombre conformaría una tríada de riesgo: hacia las mujeres y los niños; hacia otros hombres, y hacia sí mismo.

Exner‐Cortens et al. (2021), en su artículo de revisión sistemática, presentaron 29 artículos cuantitativos (69%) y cualitativos (31%) revisados ​​por pares publicados en inglés entre 1997 y 2017, abarcando un periodo de 20 años. Los artículos debían centrarse en varones adolescentes de 10 a 18 años de edad, o en escuela media o secundaria, y evaluar un constructo de masculinidad, entendido como normas de rol, atributos e identidad; así como un resultado de salud mental, de problemas de conducta y/o apoyo social. Los resultados arrojaron que una mayor adherencia a las normas estereotipadas de roles de género (masculino) se asoció generalmente con más problemas de conducta y menor apoyo social. En los artículos cualitativos, el tema más predominante fue la restricción emocional y las consecuencias para la salud mental. Sin embargo, el estudio reporta varias limitaciones, primero debido a limitaciones de recursos no se pudieron evaluar diferentes variables asociadas (adicciones, ideación suicida y trastornos de la personalidad) y segundo, todos los estudios cuantitativos excepto tres utilizaron muestras no representativas, y todos, menos cuatro, utilizaron un diseño transversal. Por tanto, los hallazgos deben interpretarse con cautela.

Kim y Yu (2023) realizaron una revisión de alcance sobre la salud mental de los hombres y tipos de intervenciones adaptadas a la masculinidad, donde se revisaron estudios de 2018-2023 abarcando un periodo de 5 años, se examinaron utilizando palabras clave para extraer estudios relevantes de PubMed, CINAHL, Scopus y Web of Science, con verificación por parte de ambos autores. Se identificaron 12 estudios que constan de seis ensayos controlados aleatorios, cuatro estudios cualitativos y dos estudios de métodos mixtos. Los estudios identificados en esta revisión encontraron que la influencia de la masculinidad limita el comportamiento de búsqueda de salud, la exposición emocional y conduce a estrategias de afrontamiento desadaptativas. Sin embargo, esta revisión tuvo ciertas limitaciones, como lo fue examinar estudios de los últimos cinco años. Es probable que se hayan perdido varios estudios más antiguos que pueden haber proporcionado información invaluable; por lo que es necesario ampliar el periodo de publicación. Además, la inclusión solo de literatura en inglés y el pequeño tamaño de la muestra de algunos de los estudios revisados pueden haber sesgado sus hallazgos. Por lo tanto, los autores recomiendan que estudios futuros deben considerar muestras significativas, así como emplear enfoques innovadores, de intervención y evaluación basados en tecnología.

Así, en los últimos años, la investigación ha comenzado a explorar diferentes factores causales y variables psicológicas que sustentan y perpetúan la masculinidad tradicional. Un factor causal en investigación psicológica se refiere a una variable que influye directamente en la aparición, desarrollo o mantenimiento de un fenómeno psicológico. Para que una variable sea considerada un factor causal, debe establecerse una relación de causalidad y no solo de correlación, lo que generalmente se logra mediante estudios experimentales, diseños longitudinales o modelos de mediación y moderación (Kazdin, 2021). Por su parte, las variables psicológicas según Kerlinger y Lee (2000), son cualquier característica que puede adoptar diferentes valores y que se utiliza para describir o explicar el comportamiento y los procesos mentales en la investigación científica.

Comprender estos factores es crucial para desarrollar intervenciones efectivas que promuevan un concepto de masculinidad más saludable. Sin embargo, a pesar de la creciente investigación, persisten lagunas en la literatura sobre cómo y por qué se desarrollan estas normas y cómo afectan a los individuos en distintos contextos. Por lo tanto, el objetivo de esta revisión sistemática es identificar factores causales y las variables psicológicas asociadas con la masculinidad tradicional bajo una metodología cuantitativa. Utilizando la metodología PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses), este estudio pretende ofrecer una visión comprensiva de la literatura existente, destacando las áreas clave de investigación y señalando direcciones futuras para estudios empíricos.

 

Método

Se llevó a cabo una búsqueda bibliográfica tomando en cuenta la declaración PRISMA (Page et al., 2021) de artículos sobre factores causales y las variables psicológicas asociadas con la masculinidad tradicional. Se empleó el método de búsqueda en las bases de datos: Science Direct, Scopus, Web of Science, PubMed, PsyINFO y ProQuest, la inclusión de documentos se limitó al período comprendido entre 2014 y 2024. La revisión se llevó a cabo entre abril de 2024 y julio de 2024.

 

Criterios de elegibilidad

Los criterios de inclusión para la revisión sistemática fueron los siguientes: artículos de revista revisados por pares de 2014-2024, idioma inglés o español, estudios cuantitativos (correlacionales) o modelo de regresión lineal, la población en adolescentes o adultos, y que manejan la variable masculinidad (tradicional, hegemónica o rol de género) relacionado con alguna variable psicológica. Por otra parte, los criterios de exclusión fueron: memorias de congreso, capítulos de libros, metaanálisis o revisiones sistemáticas, artículos cualitativos o artículos descriptivos.

 

Búsqueda

Una vez establecidos los criterios de inclusión y de exclusión, se utilizaron palabras clave y operadores booleanos, así como una cadena de búsqueda con el objetivo de llevar a cabo una búsqueda estratégica de la literatura disponible y así seleccionar los artículos, la cadena quedó constituida de la siguiente manera: Adults AND teenagers AND (“traditional masculinity” OR “hegemonic masculinity”) AND “parenting styles” AND “emotional regulation” AND psychology.

 

Selección de estudios y extracción de datos

En la búsqueda se identificaron 258 artículos potencialmente relevantes. Después se eliminaron los duplicados utilizando el gestor de referencias Mendeley Desktop se redujo a 228, los cuales fueron revisados por dos revisores y un tercero en caso de discordancia, se descartaron por título, resumen y palabras clave y no cumplir con los criterios de inclusión y se redujo el número a 34 estudios, se hizo una revisión de texto completo y fueron seleccionados 12 artículos para ser incluidos en la revisión por cumplir completamente con los criterios de inclusión (ver Figura 1).

 

Figura 1. Diagrama de flujo de la selección de estudios método PRISMA

 

Resultados

Una representación gráfica mediante una nube de palabras (ver Figura 2) ha revelado que de las 51 palabras clave de las investigaciones examinadas relacionadas con el tema factores causales y variables psicológicas en la masculinidad tradicional/hegemónica las más frecuentes fueron masculinidad (4), masculinidad tradicional (4), masculinidad hegemónica (4), agresión (3), depresión (2), regulación emocional (2), búsqueda de ayuda (2), salud mental (2), e ideación suicida (2).

 

Figura 2. Nube de palabras que representa las palabras clave más utilizadas en los artículos seleccionados.

 

El proceso de revisión sistemática sobre factores causales y variables psicológicas en la masculinidad tradicional permitió identificar doce estudios originales (ver Tabla 1). Los resultados relevantes fueron identificar algunos posibles factores causales y variables psicológicas relacionadas con la masculinidad tradicional como: apoyo de amigos, búsqueda de ayuda, depresión, agresión, alexitimia, supresión, narcisismo, coerción e ideación suicida. Además de destacar que la mayoría de los estudios se realizaron en Estados Unidos (5), otros países fueron Australia (4), Alemania, España y Pakistán (1). Como punto a resaltar, la medida más utilizada para evaluar la masculinidad tradicional/hegemónica fue el Inventario de Conformidad con las Normas Masculinas (CMNI) en diferentes versiones (4 versiones diferentes en 5 artículos), pero la escala que tuvo mayor confiabilidad fue el Inventario de Normas de Roles Masculinos – Formulario abreviado (MRNI-SF; Levant et al., 2013) con un α = 0,92.


Tabla 1. Artículos sobre factores causales y variables psicológicas asociadas con la masculinidad tradicional

 

Referencia  

Muestra y País

 Estudio 

Instrumentos de medida

Resultados 

Variable

Logoz et al. (2023) ¿Cómo se relacionan las ideologías tradicionales de masculinidad y la competencia emocional con la agresión y la violencia doméstica física en hombres cisgénero?

 

428 hombres (edad M = 43,9 DE= 15,3)

 

Alemania

Estudio transversal. Correlacional

 

Modelos de regresión lineal

Inventario de Normas de Roles Masculinos – Formulario abreviado (MRNI-SF; Levant et al., 2013), α = 0,92 

 

Inventario de conformidad con las normas masculinas – 30 (CMNI-30; Levant et al., 2020). Confiabilidad de α = 0,85

 

Escala de alexitimia de Toronto– 26 (TAS-26; Taylor et al., 1985). Confiabilidad de α = 0,83.

 

Cuestionario de regulación de las emociones – 10 (ERQ; Gross y John, 2003), α = 0,74 (supresión) y α = 0,76 (reevaluación)

 

Escala de Autocompasión–Forma Corta (SCS-D-SF; Hupfeld y Ruffieux, 2011), confiabilidad de α = 0,89.

 

Cuestionario de Agresión de Buss y Perry (BPAQ; Buss y Perry, 1992; Herzberg, 2003), confiabilidad de α = 0,91

Los hombres con niveles fuertes de ideologías tradicionales de masculinidad (TMI), se asociaron con altos niveles de agresión (r= 0.48, p<0.001) y una competencia emocional reducida en general, como lo reflejan los altos niveles de alexitimia (r= 0.25, p<0.001), el uso frecuente de supresión expresiva (r= 0.34, p<0.001) y los bajos niveles de autocompasión (r= 0.36, p<0.001). Una fuerte conformidad con TMI se asoció con una mayor probabilidad de perpetración de violencia doméstica al considerar covariables sociodemográficas relevantes.

Consecuente:

 

Agresión

Alexitimia

Supresión Autocompasión

Coleman-Kirumba et al. (2023)

Experiencias de hombres negros: formas de masculinidad y efectos sobre variables psicológicas de búsqueda de ayuda

160 hombres de 19 a 77 años (M = 32,39, SD = 11,21).

 

EUA

Estudio transversal. Correlacional

 

Modelos de regresión lineal

Masculinity Inventory Scale (MIS; Mincey et al., 2014) subescala de Masculinidad Negra α = 0,81, subescala Sociedad convencional α = 0,92

 

Percepciones de estigmatización por parte de otros por buscar ayuda psicológica (PSOSH; Vogel et al., 2009) α = 0,90

 

Attitudes Toward Seeking Professional Psychological Help – Short Form (ATSPPH-SF; Fischer y Farina, 1995 ) α = 0,86

Los resultados demostraron que la masculinidad tradicional/negra y la masculinidad tradicional predijeron un mayor autoestigma y, a su vez, actitudes psicológicas menos positivas de búsqueda de ayuda. Ya que la masculinidad tradicional/negra se correlacionó positivamente con la masculinidad tradicional (r = 0,45, p < 0,001) además, se correlacionó positivamente con el autoestigma (r = 0,28, p < 0,001) y se correlacionó negativamente con las actitudes de búsqueda de ayuda psicológica (r = -.22, p = .005).

Mediadora:

 

Búsqueda de ayuda

Malonda-Vidal et al. (2021) Masculinidad tradicional y agresión en la adolescencia: su relación con los procesos emocionales

 

390 adolescentes

(208 hombres y 182 mujeres), edades 12–15 años (M= 12.74 Años).

 

España 

Estudio longitudinal,

Correlacional

 

Modelado de ecuaciones estructurales

Inventario de roles sexuales (BSRI, versión corta) (Paéz et al., 2004) masculinidad, (α = 0,79) feminidad (α = 0,78).

 

Cuestionario de agresión reactiva y proactiva (RPQ; Raine et al., 2006), agresión reactiva (α = 0,84), agresión proactiva (α = 0,93).

 

Escala de autoeficacia emocional regulatoria (Caprara et al., 2008) α = 0,71.

 

Escala de Evaluación de Resiliencia (RAS; Johnson et al., 2010)  α = 0,85 

Los resultados muestran que la feminidad se relaciona con la agresión reactiva (r= -.019, p<0.001) a través de la autoeficacia emocional regulatoria y la regulación de las emociones. Además, la masculinidad tradicional se relaciona de manera positiva y directa con la agresión reactiva (r=0.15, p < 0.001), actuando como factor de vulnerabilidad de las conductas agresivas estudiadas.

Consecuente:

 

Agresión

Van Doorn et al. (2021) Problemas paternales: los amigos más que los padres influyen en la masculinidad hegemónica de los hombres adultos

 

188 hombres de 18 a 62 años (M= 31.71, SD = 9.49).

 

Australia

Estudio transversal. Correlacional

 

Modelos de regresión lineal

Inventario de conformidad con las normas masculinas -29 (CMNI-29; Hsu y Iwamoto, 2014) α = 0.84

K-Short Form-42 (K-SF-42; Figueredo et al., 2018) Calidad de la relación con el padre (α = 0,88). Calidad de la relación con la madre (α = 0,87). Contacto y apoyo social familiar (α = 0,90). Contacto y apoyo social Amigos (α = 0,91)

Escala de Experiencias Adversas en la Infancia (ACE; Mersky et al., 2017) α = 0.81

Los resultados de un análisis de regresión jerárquica mostraron que la calidad autoinformada de la relación padre-hijo no predijo la masculinidad hegemónica. Las experiencias infantiles adversas, la calidad de la relación madre-hijo y el apoyo familiar tampoco lograron predecir la masculinidad hegemónica. Sin embargo, una disminución en el apoyo de los amigos se asoció con un aumento de la masculinidad hegemónica (r = -0.18, p<0.05), incluso después de controlar todas las demás variables.

Causal:

Apoyo de amigos

Waddell et al (2020) Dominación o engaño: El papel de la Tríada Oscura y la masculinidad hegemónica en la manipulación emocional

320 participantes (119 hombres, 208 mujeres) con un rango de edad de 18 a 71 años (M = 30.54, SD = 11.89)

 

Australia

Estudio transversal. Correlacional

 

Modelos de regresión lineal

El Inventario de Conformidad con las Normas Masculinas-46 (CMNI-46; Parent & Moradi, 2009) α = 0.85 para mujeres, α = 0.88 hombres

Short Dark Triad (SD3; Jones y Paulhus, 2014) α = 0,71 narcisismo, α = 0,74 psicopatía mujeres y α = 0,70 hombres, y maquiavelismo α =0,75 mujeres y α = 0,81 hombres

Los análisis de regresión jerárquica revelaron que, tanto para hombres como para mujeres, la masculinidad hegemónica era un predictor significativo de la (b) voluntad (B = 0.31, β = 0.34, p < .001) y la (b) capacidad percibida de uno para manipular emocionalmente a los demás (B = 0.34, β = 0.31, p < .001). Además de correlacionar significativamente con las demás variables Narcisismo (0.408 p < .001) Psicopatía (0.435 p < .001) Maquiavelismo (0.483 p < .001).

Mediadoras:

Narcisismo, Psicopatía  Maquiavelismo

King et al. (2020)  Expresiones de masculinidad y asociaciones con ideación suicida entre varones jóvenes

829 niños/jóvenes australianos, tenían entre 15 y 18 años al inicio y entre 17 y 20 años en el seguimiento.

 

Australia

Estudio longitudinal, Correlacional

 

Modelado de ecuaciones estructurales

El Inventario de Conformidad con las Normas Masculinas-22 (CMNI-22; King et al., 2020) α = 0.86

Encuesta sobre conductas de riesgo en jóvenes

Los resultados de los modelos ajustados por regresión logística de la relación entre la conformidad con las normas masculinas y la ideación suicida arrojaron que, la conformidad con las normas de violencia (OR = 1,23, IC del 95%: 1,03, 1,47; p = 0,026) y las normas de autosuficiencia (OR = 1,40; IC del 95%: 1,15; 1,70; p = 0,001), se asociaron con mayores probabilidades de informar ideación suicida. Además, una mayor conformidad con las normas heterosexuales se asoció con menores probabilidades de informar ideación suicida (OR = 0,80; IC del 95 %: 0,68; 0,91; p = 0,001).

Consecuente:

Ideación suicida

Liaqat et al. (2020) Impacto de la masculinidad y la alexitimia masculina normativa en las dificultades interpersonales en varones adultos jóvenes

232 hombres adultos de 18 a 24 años (M =21.33, SD=1.87)

 

Pakistán

Estudio transversal. Correlacional

 

Modelos de regresión lineal

Escala de Actitud y Rol Sexual (SRAS; Anila y Ansari ,1992) α = 0.77

Escala Normativa de Alexitimia Masculina (NMAS; Levant et al., 2006) α = 0.73

Escala de dificultades interpersonales (Saleem et al. 2014) Desconfianza (α = 0,71), relaciones inestables (α = 0,72) y límites (α = 0,66).

 

 

 

 

 

Los resultados sugirieron que, con el aumento de la masculinidad tradicional, también aumentan la alexitimia masculina normativa (r=0.55, p<0.01) y las dificultades interpersonales (desconfianza r=0.49, p<0.01), relaciones inestables (r=0.49, p<0.01), y límites (r=0.14, p<0.05). Además, la alexitimia masculina normativa media la relación entre la masculinidad tradicional y las dificultades interpersonales.

Mediadora:

Alexitimia

 

Clark et al. (2020) Investigar el impacto de la masculinidad en la relación entre la alfabetización en salud mental específica de la ansiedad y la búsqueda de ayuda en salud mental en varones adolescentes

 

1.737 adolescentes varones, de entre 12 y 18 años (M = 14,83, DE = 1,33)

Australia

Estudio transversal. Correlacional

 

Modelos de regresión lineal

 Escala de ideología de masculinidad adolescente en las relaciones (AMIRS; Chu et al. 2005) α = .78

Versión abreviada de la Escala de Actitudes hacia la Búsqueda de Ayuda Profesional (10 ítems) (AT SPHS; Fischer y Farina, 1995) α =.79

General Help Seeking Questionnaire (GHSQ; Wilson, et al., 2005). α =.88

La masculinidad fue un predictor significativo de todas las actitudes e intenciones de búsqueda de ayuda. Una mayor alineación con las normas de masculinidad se asoció con menores intenciones de buscar ayuda de los compañeros (b = -0,08, t = -5,71, p < 0,001), familia (b = -0,15, IC del 95 %) y fuentes formales (b = -0.25, IC 95 %) y con actitudes menos favorables hacia las informales (b = -0.06, t = -7.57, p < .001) o búsqueda de ayuda formal (b = -0.03, SE = 0.002, t = -17.62, p < .001). Por el contrario, una mayor masculinidad se asoció con una mayor intención de buscar ayuda en fuentes en línea (b = 0,05, SE = 0,01, IC del 95 %)

Mediadora:

Búsqueda de ayuda

Rogers et al. (2020) La adhesión al rol de género masculino indica patrones de resolución de conflictos en parejas adolescentes heterosexuales: un estudio observacional diádico

91 parejas de adolescentes heterosexuales del suroeste de los Estados Unidos (edad M = 16,50, SD = 0,90),

 

EUA

Estudio longitudinal, Correlacional

Escala de ideología de masculinidad adolescente en las relaciones (AMIRS; Chu et al. 2005). Mujeres  (α = .82) Hombres (α = .80).

Los resultados indicaron que los adolescentes más masculinos generalmente mostraban menos negociación de conflictos (-0.26 p < .05) y más coerción (presión ejercida sobre alguien para forzar su voluntad o su conducta) durante la tarea de discusión (0.27 p < .05), por último, la masculinidad no estuvo asociada con la evitación de conflictos.

Consecuente:

Negociación de conflictos Coerción

 

Genuchi (2018). El papel de la masculinidad y los síntomas depresivos en la predicción de la ideación suicida en hombres sin hogar

94 hombres sin hogar (M = 44.9 años, DE = 12.09).

 

EUA

Estudio Transversal Correlacional

 

 

El Inventario de Conformidad con las Normas Masculinas-46 (CMNI-46; Parent y Moradi, 2009) (α =.78 -.91)

 

El Inventario de Depresión de Beck-II (BDI-II; Beck et al. 1996) (α =.91)

 

El cuestionario de detección de diagnóstico psiquiátrico (PDSQ; Zimmerman, 2002) (α =.73-.95)

 

Escala de Beck para la ideación suicida (BSS; Beck y Steer, 1993) (α = .87-.90)

Los síntomas internalizados de depresión predijeron la existencia de ideación suicida (t = 2.73, p < .01) y  las normas masculinas violencia (t = .33, p < .05)  y playboy (t = 40, p < .05) se correlacionaron con la ideación suicida de los hombres

Consecuente:

 

Ideación suicida

Rogers et al. (2017)

Masculinidad tradicional durante la transición a la escuela secundaria: asociaciones con síntomas depresivos y compromiso académico

280 adolescentes de 10-15 años

 

EUA

Estudio longitudinal, Correlacional

Escala de ideología de masculinidad adolescente en las relaciones (AMIRS; Chu et al. 2005). Consistencia en ambos momentos (αT1 = .73, αT2 = .78).

 

Inventario de depresión, segunda edición, versión corta (CDI-S) (Kovacs 1984; Allgaier et al. 2012). Consistencia en ambos momentos (aT1 = .70, aT2 = .74).

 

Versión adaptada de la Experiencia Formulario de muestreo (ESF; Csikszentmihalyi y Larson 1987) Consistencia en ambos momentos (aT1 = .79, aT2 = .76).

Se encontró que la conformidad con la masculinidad tradicional predijo mayores síntomas depresivos (T1= r=0.28, p<0.01) (T2= r=0.24, p<0.01) y una menor participación académica (T1= r= -0.31, p<0.01) (T2= r=-0.32, p<0.01). Los síntomas depresivos también mediaron la asociación entre la masculinidad tradicional y el compromiso académico.

Mediadora y consecuente:

 

Depresión

Coleman (2015) La masculinidad tradicional como factor de riesgo para la ideación suicida: evidencia transversal y prospectiva de un estudio de adultos jóvenes

1.580 mujeres y

851 hombres en el primer muestreo y 1.391 mujeres

y 647 hombres en el muestreo dos.

 

EUA

Estudio transversal

Correlacional

Cuestionario ampliado de atributos personales (EPAQ; Helmreich et al., 1981) (α =.72)

 

Escala de ideación suicida (Beck et al., 1997) (α =.72)

 

Subescala de depresión de 4 ítems de Veit y Ware (1983) (α=.83)

La masculinidad tradicional se asoció con la ideación suicida (muestra 1= r=0.27, p<0.001) (muestra 2= (r=0.15, p<0.001), solo superada en fuerza por la depresión (r=0.22, p<0.001), incluso cuando se controlan otros factores de riesgo.

Consecuente:

 

Ideación suicida

Depresión

 


A continuación, se describirán los conceptos identificados dentro de los artículos encontrados en la revisión sistemática.

Agresión: Se define como un comportamiento intencional que causa daño físico o emocional a otra persona o grupo. Este concepto puede abarcar una amplia gama de acciones, desde agresiones físicas directas, como golpear o empujar, hasta agresiones verbales, como insultos o amenazas (Logoz et al., 2023; Malonda-Vidal et al., 2021).

Alexitimia: Se define como un trastorno psicológico caracterizado por la dificultad para identificar y expresar emociones. Las personas con alexitimia a menudo tienen problemas para reconocer sus propios sentimientos y los de los demás, lo que puede llevar a una comunicación emocional limitada y a dificultades en las relaciones interpersonales (Liaqat et al., 2020; Logoz et al., 2023).

Coerción: Se define como el uso de fuerza, amenazas, intimidación o presión para obligar a una persona a actuar de una manera específica, incluso en contra de su voluntad. Este concepto implica una relación de poder desigual, donde la persona que ejerce la coerción influye o controla las decisiones de la otra persona a través de medios que pueden ser físicos, psicológicos o sociales (Rogers et al., 2020).

Depresión: Es un trastorno del estado de ánimo que se caracteriza por una tristeza persistente, una pérdida de interés en actividades que antes se disfrutaban y otros síntomas que pueden afectar la capacidad de una persona para funcionar en la vida diaria (Coleman, 2015; Rogers et al., 2017).

Ideación suicida: Se entiende como el conjunto de pensamientos, reflexiones y deseos relacionados con la muerte o el acto de suicidarse. Esta definición incluye diferentes niveles de gravedad y expectativas, que van desde pensamientos pasajeros sobre la muerte hasta planes concretos para llevar a cabo un suicidio (Coleman, 2015; Genuchi, 2018; King et al., 2020).

Narcisismo: Es un término que se refiere a una fijación o admiración excesiva por uno mismo, que puede manifestarse como un sentido exagerado de la propia importancia, necesidades y logros. En un contexto psicológico, el narcisismo puede referirse a una característica de la personalidad o a un trastorno de la personalidad (Waddell et al., 2020).

Supresión emocional: Se define como un mecanismo de defensa que implica la inhibición o el rechazo consciente de expresar emociones, ya sea a través de la represión de sentimientos o la evitación de situaciones que puedan provocar una respuesta emocional. Esto puede incluir la negación de experiencias emocionales, como tristeza, enfado o ansiedad, para evitar malestar o para cumplir con normas sociales y expectativas (Logoz et al., 2023).

 

Discusión

Primeramente, en la revisión se observa que los conceptos de masculinidad tradicional y hegemónica se utilizan de manera indiscriminada (Coleman, 2015; Malonda-Vidal et al., 2021; Logoz et al., 2023; Rogers et al., 2017; Van Doorn et al., 2021; Waddell et al., 2020), lo que refleja una falta de diferenciación conceptual en la literatura. Además, se identificó que el Inventario de Conformidad con las Normas Masculinas (CMNI) fue la medida más utilizada para evaluar la masculinidad tradicional/hegemónica, apareciendo en 5 artículos en 4 versiones diferentes. Sin embargo, la escala que mostró una mayor consistencia interna y confiabilidad fue el Inventario de Normas de Roles Masculinos – Formulario abreviado (MRNI-SF; Levant et al., 2013), lo que sugiere su utilidad como una herramienta más precisa para futuras investigaciones. Estos hallazgos subrayan la importancia de adoptar instrumentos válidos y consistentes para evaluar la masculinidad y fomentar una terminología más clara en el análisis académico.

De acuerdo con las variables psicológicas encontradas, referente a los estudios que relacionaron la masculinidad tradicional y la depresión, se describe en términos de cómo las normas de género afectan la salud mental de los hombres (Coleman, 2015; Rogers et al., 2017). Esto podría incluir factores como la presión para adherirse a los ideales de masculinidad, que pueden llevar a la represión de emociones y a una mayor vulnerabilidad a los síntomas depresivos, igualmente, esta represión emocional y el miedo al estigma asociado con la salud mental pueden contribuir a la ideación suicida en los hombres jóvenes. La falta de apoyo social y la dificultad para expresar emociones pueden intensificar sentimientos de desesperanza y aislamiento, que son los principales factores de riesgo (Coleman, 2015; Genuchi, 2018; King et al., 2020).

Esto subraya cómo ciertos rasgos, como la supresión emocional y el rechazo de la búsqueda de ayuda, pueden tener consecuencias adversas para la salud mental, un área destacada por estudios recientes que abogan por intervenciones enfocadas en la salud masculina y en modelos de masculinidad más flexibles (Kim y Yu, 2023).

Referente a la variable de agresión Malonda-Vidal et al. (2021), señalan cómo los estereotipos de género pueden tener un impacto significativo en los comportamientos agresivos de los jóvenes. La masculinidad tradicional se asocia frecuentemente con rasgos como la competitividad, la dominación y la represión emocional, lo que puede incitar a los adolescentes a adoptar comportamientos agresivos como una manera de demostrar su identidad masculina. Además, aquellos adolescentes que se sienten presionados a cumplir con estos estereotipos pueden expresar agresión reactiva, es decir, en respuesta a provocaciones, o agresión proactiva, que implica utilizar la violencia como un medio para ejercer control o dominio sobre otros. Este patrón sugiere un ciclo en el que la necesidad de validar su masculinidad lleva a conductas que perpetúan la agresión.

Lo que nos lleva al factor del apoyo social, particularmente el de amigos, este hallazgo sugiere que el entorno social masculino refuerza comportamientos tradicionalmente asociados con la masculinidad, ya que las amistades proporcionan un sentido de comunidad y pertenencia, por lo tanto los hombres en una edad temprana aprenden a través de la observación de otros y a través de la presión de grupo, replican comportamientos de cómo evitar mostrar vulnerabilidad, competitividad o rechazar la búsqueda de ayuda emocional (Van Doorn et al., 2021).

Por último, tomando en cuenta la recomendación de Kim y Yu (2023) de ampliar el periodo de búsqueda, se logró identificar diversos artículos que profundizan en las variables relacionadas con la masculinidad tradicional (Coleman, 2015; Genuchi, 2018; Rogers et al., 2017). No obstante, una limitación relevante fue la escasez de artículos latinoamericanos, debido a que el filtro de revisión por pares eliminó gran parte de ellos, y otros no cumplieron con los criterios de inclusión y exclusión. Como resultado, la muestra final incluyó 12 artículos, en su mayoría procedentes de Estados Unidos (5) y Australia (4). Esta situación pone en evidencia la necesidad de fomentar la producción académica revisada por pares en Latinoamérica, además de aumentar los rigores metodológicos en los estudios de masculinidad y género, lo que podría enriquecer futuros estudios y aportar nuevas perspectivas culturales al análisis de la masculinidad.

Resumiendo, en esta revisión sistemática se identificaron múltiples variables psicológicas vinculadas con la masculinidad tradicional, como la depresión, agresión, alexitimia, supresión emocional, narcisismo, coerción e ideación suicida (Liaqat et al., 2020; King et al., 2020; Waddell et al., 2020; Malonda-Vidal et al., 2021; Logoz et al., 2023). También se destacó la influencia del apoyo social, especialmente de amigos, y la búsqueda de ayuda como factores relevantes (Clark et al., 2020; Van Doorn et al., 2021; Coleman-Kirumba et al., 2023). Por lo tanto, es crucial explorar alternativas para la expresión de la masculinidad con el fin de reducir las diversas consecuencias asociadas a las masculinidades tradicionales. Actualmente, se están presentando modelos de nuevas masculinidades que tienen una connotación positiva y que fomentan la noción de un trato equitativo entre hombres y mujeres (Pérez-Martínez, 2024).

Estos hallazgos ofrecen oportunidades para que los profesionales de la salud mental formulen intervenciones efectivas. Esto incluye desarrollar enfoques terapéuticos que integren la expresión emocional y la vulnerabilidad, crear talleres de sensibilización sobre las normas de género, promover redes de apoyo entre hombres, y aplicar evaluaciones psicológicas sensibles al género. Asimismo, es crucial implementar políticas públicas que aborden las necesidades específicas de salud mental de los hombres, realizar campañas que desafíen estereotipos dañinos y asegurar el acceso a servicios amigables, fomentando así un cambio en la comprensión y la aceptación de la salud emocional masculina.

 

Conclusión

Este estudio aporta una visión integral de cómo diferentes factores contribuyen a la construcción de la masculinidad tradicional, ofreciendo una base para futuras investigaciones e intervenciones. Destaca que la masculinidad tradicional está estrechamente relacionada con varias variables psicológicas, como la depresión, la agresión y la ideación suicida. Además, se identificaron factores causales como el apoyo social y la búsqueda de ayuda. La integración de variables psicológicas en el análisis de la masculinidad es una contribución importante que amplía la comprensión del tema más allá de una perspectiva puramente sociológica. Por lo tanto, comprender los factores psicológicos y causales detrás de la masculinidad tradicional es esencial para desarrollar intervenciones efectivas que promuevan una mayor equidad de género. Sin embargo, la exclusión de artículos latinoamericanos revela una limitación metodológica, resaltando la necesidad de aumentar el rigor metodológico de los estudios, así como ampliar las fuentes de información para lograr un análisis más inclusivo y contextualizado.

Además, los estudios sobre la masculinidad enfrentan varios retos que limitan la comprensión de su impacto en la salud mental. En primer lugar, las profundas y arraigadas normas culturales en algunos contextos dificultan desafiar y cambiar estas expectativas, lo que puede generar resistencia tanto a nivel individual como comunitario. Asimismo, la estigmatización de la vulnerabilidad arrastra a muchos hombres a evitar discutir sus problemas emocionales, lo que reduce la representación de experiencias diversas en la investigación. La diversidad en las formas de vivir la masculinidad también plantea un desafío, ya que es esencial captar las variaciones significativas entre diferentes culturas, etnias y clases sociales. También, el enfoque metodológico puede influir en los hallazgos, dado que las técnicas que no abordan adecuadamente las normas de género corren el riesgo de ofrecer interpretaciones sesgadas de las experiencias masculinas.

Para abordar estos desafíos, es fundamental promover un diálogo abierto que permita a los hombres discutir sus experiencias con la masculinidad y la salud mental en espacios seguros. Incluir diversas perspectivas en las investigaciones, considerando aspectos como edad, raza, clase y orientación sexual, enriquecerá la comprensión del tema. Además, se recomienda adoptar metodologías inclusivas que integren tanto enfoques cuantitativos como cualitativos, sin perder el rigor metodológico. Sumado a esto, la evaluación de políticas públicas puede ayudar a establecer intervenciones más efectivas y a mejorar el bienestar de los hombres en distintas comunidades fomentando nuevas formas de expresar la masculinidad.

Por último, para líneas futuras de investigación en el ámbito cuantitativo en temas de género y masculinidades se recomienda utilizar muestras significativas, ya que en estos estudios es una de las mayores carencias, así como medidas de evaluación confiables de acuerdo a los conceptos o constructos que se quieran medir y si es posible el uso de tecnología o nuevas formas de evaluación que no sean autoinforme (baterías neuropsicológicas, aplicaciones móviles, instrumentos didácticos, entre otras).

 

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[1] Instituto Tecnológico de Sonora, México. Correo electrónico: francisco.manriquez167655@potros.itson.edu.mx

[2] Instituto Tecnológico de Sonora, México. Correo electrónico: giovana.diazg@itson.edu.mx

[3] Instituto Tecnológico de Sonora, México. Correo electrónico: carlos.miron@itson.edu.mx

[4] Instituto Tecnológico de Sonora, México. Correo electrónico: jehomara.mercado136057@potros.itson.edu.mx